Pamplona está orgullosa de lo que es. De su historia, su identidad, sus raíces... Pero, sobre todo, de todo lo que ha conseguido con esfuerzo y talento compartido.
Sabe lo que tiene, que es mucho, y también lo que cuesta conseguirlo y cuidarlo. Por eso, en Pamplona no gusta la ostentación, pero sí, y mucho, la naturalidad.
En Pamplona las cosas y la gente son como parecen. Leal, noble, de palabra. Sin trampa ni cartón. Ni monumentos ni estadísticas.
Lo que de verdad hace única a Pamplona es su gente. Personas de verdad.
Pamplona la hacen cada día todos los pamploneses y pamplonesas de la ciudad. Gente conocida y gente anónima. Todos son igual de importantes. Con nuestros 8 embajadores y embajadoras te mostramos, desde distintos ámbitos, cómo es nuestra gente. Gente de verdad.